Phoenix Suns se pasa a la defensa

El nuevo entrenador de la franquicia de Arizona, Terry Porter, ha salido a la palestra para dejar claro, si es que todavía alguien lo dudaba, que los tiempos de grandes anotaciones en los Suns ya forman parte de la historia. Su llegada, y el adiós de D’Antoni significan que “probablemente los Suns no vayan a anotar 115 puntos por noche” dijo Porter, aunque por otra parte dejó bien claro que iban a ganar poderío en el aspecto defensivo, sobre el que dijo estar seguro que mejorará mucho.
Los Suns serán la temporada que viene “un equipo que anote 100 puntos”, pero que tendrá "mucha más presencia en la línea defensiva”. Lo que no dijo Porter es cómo va a afectar ese cambio de mentalidad en el director de juego Steve Nash, que no ha llegado a ser MVP precisamente por ser un dechado de virtudes cuando es el equipo contrario el que tiene la bola. “Nuestra defensa será mejor porque tendremos diferentes esquemas” sentenció el coach, a lo que añadió que el nuevo proyecto es “un reto”, y que tiene que ir viendo cómo responden los jugadores a la idea de equipo que le ronda la cabeza. Por lo que respecta a la rotación, la profundidad del banquillo parece que será lo que mayores dificultades provoque en Porter, ya que sabe que “una rotación de 10 hombres es muy difícil”, por lo que espera ver el rendimiento de las nuevas incorporaciones: el center Robin López, el alero Matt Barnes, el base rookie Sean Singletary, Louis Amundson y el anteriormente vinculado al TAU Goran Dragic. Sobre todo el base esloveno es del que se espera una mayor presencia en la cancha. De su aportación dependerá en gran medida el resultado que den los hombres de refresco. Su rol de sustituto de Nash, al que esperan resguardar esta temporada para que llegue fresco a play offs, ha provocado que todas las miradas estén puestas en él como la gran incorporación de los Suns. Porter, tras ver al esloveno en directo, define a Dragic, de 22 años, como “un jugador que lee bien diferentes situaciones de pick-and-roll y transiciones rápidas” aunque es consciente que su mayor reto será adaptarse al ritmo de la NBA, a la cultura americana y que deberá luchar en un juego más físico. En verano, la idea del staff de los Suns era encontrar un base veterano que ocupara el lugar de Nash 10-12 partidos antes de empezar los play offs para que llegara fresco, pero con Dragic, esperan que se convierta en un buen aprendiz y puedan descender unos cuantos minutos la media de 34’8 que ha tenido en las últimas cuatro campañas. “Si pudiéramos tener profundidad de banquillo y una mayor aportación de los jóvenes y los nuevos, todos podríamos tener más descanso” declaró Steve Nash, consciente de que siempre ha llegado fundido a la recta final de la temporada, restando posibilidades a su equipo de hacer algo grande.