A pesar de que Rodney Stuckey se había mostrado dispuesto a cederle al recién llegado Allen Iverson su clásico número 3, que en Detroit lo calza Stuckey, las reglas de la NBA lo han impedido. Una vez iniciada la temporada un cambio número acarrea sanción.
Por eso Iverson ha declarado que lucirá el número 1, recogiendo el testigo de su predecesor Billups. AI quería seguir vistiendo el 3 pero quizá el año que viene.
Por el resto de temas que arrastra el traspaso más sonado del 2008/09, las principales dudas son acerca de cómo lo hará Curry para introducir a Iverson en el equipo titular.
Dando por descontado que Stuckey, base puro, ocupará la vacante de Billups, y tras la reciente renovación por tres temporadas más de Richard Hamilton, que lo confirma como el líder de los Pistons, la duda es si el coach Curry pondrá en pista un quinteto con tres bajitos, sacrificando a Prince.
No cabe duda que el poder anotador que tendrán los Pistons desde el perímetro con este trío va a ser espectacular, pero el problema que puede tener en defensa puede acarrearle más de un dolor de cabeza al staff de los Pistons.
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